The end

Desde hace dos meses más o menos que vengo buscando "una señal", algo que me diga que estoy en lo cierto, que mi tiempo acá ya se terminó. Le pedí al universo que me mostrara margaritas, mariposas, búhos, murciélagos. Nada. Ni una hormiga. No dudo de mi decisión, pero sí del momento, tengo miedo de lo que me espera, de lo que dejo atrás, de lo que está delante, del gran cambio, de todo.

Mañana se cumplen exactamente diez años de mi llegada a Turquía. Primero Estambul, luego Kaş, y de vuelta a Estambul. Un mundo me pasó en este tiempo, y la vida me cambió para siempre.

Hace una semana volví a Kaş por última vez para abrazar a quien fuera mi sostén, mi hermana, mi ancla.

Hoy, diez años después, me despido de Kaş y de mi gran y única amiga turca. Me voy con lágrimas en los ojos y con el corazón lleno y eternamente agradecida por todo lo vivido.

En el micro de vuelta, desde mi asiento, vi la señal que estaba buscando. No fue una margarita, ni una mariposa, ni un búho, ni un murciélago.

Para que no hubiera dudas, para que me quedara bien clarito, para no perderme en interpretaciones rebuscadas y sin sentido, "el universo" me puso ahí la señal que le estaba pidiendo. Simple, una sola palabra: FIN.